Corea del Norte ha empezado una nueva guerra propagandística contra el Gobierno de Seúl, enviando documentos, folletos y discos compactos.
Pyongyang empezó la noche del miércoles esta medida en las regiones fronterizas con su vecino sureño. En los panfletos se critica al Gobierno de la presidenta surcoreana, Park Geun-hye.
La Policía de Corea del Sur recogió unos 20.000 folletos y 40 discos compactos en la ciudad de Goyang, en la provincia de Gyeonggi, justo al noroeste de Seúl (capital surcoreana), informó la agencia local Yonhap.
Anunció que más temprano se encontraron en el centro de Seúl panfletos contra el Ejército de Corea del Sur y sus maniobras conjuntas con Estados Unidos.
Por otro lado, un grupo de desertores norcoreanos residentes en Corea del Sur envió 300.000 folletos y 4000 páginas de periódicos con mensajes contra el Gobierno de Pyongyang en la ciudad fronteriza de Paju, en la provincia de Gyeonggi.
El pasado domingo, Corea del Norte también publicó un nuevo video propagandístico en el que se muestra ataques artificiales contra edificios gubernamentales de Corea del Sur, incluida la Casa Azul, sede presidencial surcoreana.
Las tensiones en la península coreana aumentaron después de que Corea del Norte realizara en enero y febrero pruebas nucleares y de misiles balísticos. A resultas de ellas, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) endureció sus sanciones contra Pyongyang.
El 6 de marzo, Corea del Norte advirtió de que podría lanzar un ataque nuclear preventivo contra Corea del Sur y Estados Unidos en respuesta a las maniobras militares conjuntas desarrolladas por ambos países entre el 7 y el 18 de marzo.
En este sentido, el Gobierno de Pyongyang asegura que sus actividades tienen carácter disuasivo y de autodefensa ante el belicismo estadounidense y las maniobras militares conjuntas Washington-Seúl.
