Es más. La cinta de ciencia ficción basada en el relato corto del exitoso escritor Liu Cixin se estrenó durante uno de los fines de semana más competitivos de China, el del Nuevo Año Lunar, y no se estrenó en primer lugar. Debutó en cuarta posición del ranking y fue escalando posiciones poco a poco hasta terminar primera en el fin de semana.
Ni corto ni perezoso, Netflix enseguida se puso manos a la obra y ha cerrado un acuerdo para contar con ella en su catálogo internacional, fuera de China.
Este blockbuster chino costó $50 millones en hacerse y transcurre en un futuro cercano donde el destino de la humanidad se ve amenazado por la inminente explosión del sol.Para salvar el planeta se decide desplazar a la Tierra del Sistema Solar utilizando la gravedad de Jupiter y motores gigantes. Pero el plan no va como estaba pensado, y la Tierra se dirige hacia una colisión fatal contra el planeta gaseoso.
La película contó con un trabajo brutal de postproducción que requirió de un equipo de 7.000 personas desarrollando los efectos especiales a lo largo de dos años, con más de 3.000 diseños conceptuales, más de 2.000 tomas con efectos y unos 10 mil artefactos de utilería construidos para el filme.
Incluso James Cameron, uno de los pioneros en la industria de los efectos especiales, ha aplaudido a la película. “Demuestra que los productores pueden competir con otras compañías de efectos visuales del mundo. China está preparada para abrazar este mercado”, dijo en un evento de Pekín el pasado 18 de febrero acompañado por el escritor de la historia, Liu Cixin, cuando estaba en la ciudad para promover su nueva cinta como productor, Alita: ángel de combate.
The Wandering Earth estará disponible en Netflix a lo largo de 2019.
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