Ian Somerhalder una nostalgia que no puede, ni quiere, disimular. “Cuando trabajaba como modelo visitaba España hasta cinco veces al año, de norte a sur y de este a oeste. Me gusta tanto que no descarto vivir aquí unos meses al año con mi familia”.
Recorrer la pasarela 30 años –empezó a los 11 y ahora tiene 41– le permitió “perder el miedo a la cámara y conocer el mundo y a gente extraordinaria…” Pero todo eso pasó. Ahora, tras su paso por ‘Perdidos’ y 172 episodios como Damon en ‘Crónicas vampíricas’, se reencarna en Luther Swann, un científico que lucha contra una terrible enfermedad en la nueva ‘V-Wars’. “Sus únicos poderes son la amistad y la paternidad”, asegura Ian, que aporta además su teoría sobre los héroes televisivos: “Interpretamos a gente normal que se comporta de forma extraordinaria y en este caso eso se lo debo al talento del escritor Jonathan Maberry, al de mi coproductor James Gibb y al de mis guionistas”.
Recorrer la pasarela 30 años –empezó a los 11 y ahora tiene 41– le permitió “perder el miedo a la cámara y conocer el mundo y a gente extraordinaria…” Pero todo eso pasó. Ahora, tras su paso por ‘Perdidos’ y 172 episodios como Damon en ‘Crónicas vampíricas’, se reencarna en Luther Swann, un científico que lucha contra una terrible enfermedad en la nueva ‘V-Wars’. “Sus únicos poderes son la amistad y la paternidad”, asegura Ian, que aporta además su teoría sobre los héroes televisivos: “Interpretamos a gente normal que se comporta de forma extraordinaria y en este caso eso se lo debo al talento del escritor Jonathan Maberry, al de mi coproductor James Gibb y al de mis guionistas”.
Danny Boyle en el horizonte
Pero, ¿era estrictamente necesario protagonizar otra serie sobre vampiros? (Risas). “No creo que esté encasillado porque ‘V-Wars’ es muy diferente a ‘Crónicas vampíricas’, no es sobrenatural, y no habla de vampiros de 165 años, sino de gente de ahora con una infección, es como la película ‘28 días después’, pero yo no soy [el director] Danny Boyle, aunque espero serlo algún día”. Como protagonista, codirector y cofinanciador de la serie para Netflix, Ian no lo ha tenido fácil: “He aprendido mucho, lo digo sin falsa modestia, desde que empecé con ‘Smallville’ (2004) o ‘Perdidos’, o en algunas buenas películas. Conozco mi oficio, y cuando me senté ocho meses en una sala con James Gibb y mi montador Paul G. Day sabíamos lo que hacíamos. He puesto mi corazón y mi alma en esta producción”.
Bajo el árbol
Y la salud, apuntamos, porque para tener la serie a tiempo para los reshoots [retoques] de la plataforma del pasado abril, Ian y sus colaboradores trabajaron hasta la madrugada durante 11 meses y él mismo acabó en el hospital por agotamiento. “Pero lo conseguimos con mucho café, cervezas negras y paciencia familiar. Ahora estoy ilusionado por estar al lado de tantas buenas producciones”, asegura un intérprete que sonó como sustituto de Jamie Dornan en ‘Cincuenta sombras de Grey’. Se ha centrado en una televisión que no para de cambiar y de la que guarda magníficos recuerdos: “Nunca olvidaré el primer día de rodaje de ‘Perdidos’, con los creadores J.J. Abrams, Jeffrey Lieber y Damon Lindelof leyéndonos el guion del episodio piloto a los 14 protagonistas en la playa, debajo de un árbol enorme y mirando el mar. Nos dieron las gracias por estar en el proyecto y nos regalaron unas carísimas cámaras digitales con las que empezamos a grabarnos unos a otros como locos. Ahí pensé, ¡guau, esta es mi vida!”.
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