Rusia rechaza “tajantemente” las sanciones “absurdas” de EEUU contra sus instituciones de investigación involucradas en el trabajo sobre vacuna contra COVID-19.
Estados Unidos agregó el miércoles a su lista de sanciones a cinco instituciones de investigación rusas, involucradas en el desarrollo de la vacuna de la pandemia del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, acusándolas de tener “vínculos con el programa químico ruso y el terreno de pruebas de armas químicas y biológicas”.
Al respecto, el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, en duras declaraciones ofrecidas este jueves, ha manifestado que esta medida del Gobierno estadounidense, “es un disparate total” y estas acusaciones se introducen bajo pretextos inadmisibles. “Es una adicción a sanciones, un teatro del absurdo de las sanciones”, ha afirmado.
En esta misma línea, Peskov, denunciando otra vez más este “teatro” de Washington, ha subrayado: “Nosotros, desde luego, rechazamos tajantemente las declaraciones de que nuestras organizaciones puedan estar implicadas en desarrollo de armas químicas y bacteriológicas”.
Estos infundios de la Administración estadounidense se producen mientras que Rusia, como uno de los mejores países en controlar la pandemia mortal, presentó la primera vacuna contra la COVID-19 en el mundo, denominada ‘Sputnik V’, que hasta ahora más de 25 países han solicitado comprar 1000 millones de dosis de la vacuna rusa.
Mientras que la Casa Blanca sigue acusando a Rusia, el presidente Vladímir Putin, ha informado en la misma jornada de la segunda vacuna contra el virus temible que estará lista en septiembre. “Estoy seguro de que los especialistas … crearán un fármaco excelente que será de gran ayuda para la gente”, ha manifestado el mandatario ruso durante una conferencia de prensa.
Rusia calcula que podrían producir al menos 500 millones de dosis cada año y evalúa a varios países para iniciar la producción en masa, en particular en América Latina.
La COVID-19 aún sigue propagándose con un ritmo imparable en el mundo. Según las cifras proporcionadas en el portal de estadísticas mundiales Worldometers, hasta el momento, 830 439 personas han muerto por causa de la pandemia.
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